La franquicia de moda Desigual cerrará su ejercicio fiscal 2022 con unos ingresos de 379 millones de euros, un 2,2% más, y un beneficio neto de 3 millones de euros, un 15% más que en 2021, según informó este jueves.
Al hacerlo, Desigual registró dos años consecutivos de crecimiento secuencial de ventas y ganancias que no había logrado en años anteriores, con una tendencia a la baja de los ingresos a medida que se intensificaba la pandemia.
Los números que genera la franquicia Desigual a día de hoy distan mucho de lo que ha logrado, como en 2015, cuando sus ingresos superaron los 900 millones y su beneficio superó los 60 millones.
Su propietario, el empresario Thomas Meyer, admitió un mes antes de la pandemia que los números ya no eran una meta: «Hemos perdido el contacto con el mercado», dijo en su única conferencia de prensa hasta el momento. La empresa concede activamente importancia a la estabilidad de los beneficios y al crecimiento de las ventas,