Vodafone se convertirá en accionista mayoritario de Finetwork

Vodafone se convertirá en accionista mayoritario de la franquicia Finetwork, tras recibir luz verde del Juzgado de lo Mercantil nº1 de Alicante para ejecutar su plan de reestructuración y hacerse con el 95% del capital de Wewi Mobile, la matriz de la operadora alicantina. Esta operación representa un paso decisivo para evitar la quiebra de Finetwork y garantizar la continuidad del servicio para sus más de 1,3 millones de usuarios.


¿Qué cambia para los clientes de Finetwork?

A corto plazo, nada. Vodafone ha asegurado que no habrá cambios inmediatos en las tarifas, condiciones o cobertura. Las líneas móviles y de fibra continuarán funcionando con normalidad bajo la marca Finetwork. Sin embargo, a medio plazo, es posible que la compañía reorganice su oferta comercial, fusionando servicios o marcas para aprovechar sinergias con el catálogo de Vodafone.


La operación: capitalización de deuda y plan de rescate

El plan aprobado por el juez incluye:

  • Ampliación de capital por 50 millones de euros, mediante compensación de deuda.
  • Nueva línea de financiación de hasta 20 millones, destinada a estabilizar la operadora.
  • Prohibición de venta de activos o acuerdos corporativos por parte de los actuales propietarios de Wewi Mobile.
  • Nombramiento de un nuevo consejo de administración, con tres representantes designados por Vodafone.

Con ello, Vodafone podrá ejecutar su estrategia de integración y reestructuración, evitando la liquidación de uno de sus principales socios comerciales.


Finetwork: crecimiento comercial, modelo inviable

A pesar de los problemas financieros, Finetwork cerró 2024 con:

  • Ingresos superiores a 150 millones de euros
  • EBITDA positivo
  • Una base sólida de más de 1,3 millones de líneas activas

Sin embargo, el modelo de negocio resultó insostenible, con una deuda acumulada con Vodafone superior a 70 millones de euros. La valoración de la compañía en la operación ha sido de cero euros, justificando la capitalización total de la deuda y un plan de pagos a largo plazo de hasta diez años para el resto de obligaciones.


Fin a meses de conflicto legal y mercantil

La operación pone punto final a un proceso conflictivo entre ambas compañías, marcado por:

  • Demandas cruzadas, embargos y reclamaciones judiciales
  • Una venta frustrada a Olin (fondo Asterion), que ya había sido anunciada internamente en junio
  • Denuncias por parte de Finetwork contra Vodafone por supuestos incumplimientos contractuales y reclamaciones por más de 150 millones de euros

Próximos pasos: autorización y recurso

La operación aún debe ser validada por la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) y la Junta de Inversiones Exteriores (Jinvex), dado que Vodafone España está controlada por el fondo británico Zegona. Se espera una resolución en las próximas semanas.

Mientras tanto, la franquicia anuncia que recurrirá el auto ante la Audiencia Provincial de Alicante. Alegará que la operación fue autorizada sin el conocimiento ni aprobación de sus socios, a través del administrador concursal FTI Consulting, lo que según la empresa les ha privado de su derecho a voto y decisión.


¿Y en el futuro?

Vodafone podría reabrir conversaciones con Asterion para incorporarlo al accionariado, lo que daría entrada a un fondo que ya estuvo interesado en adquirir Finetwork. A medio plazo, esta integración también podría fortalecer la posición de Vodafone ante una posible operación corporativa mayor, como una eventual fusión o venta a Telefónica.